¡Orgullosos de ser reconocidos por nuestro compromiso con la economía circular!

Terracor Grup se complace en anunciar que ha sido galardonado en la I Edición de los Premios Empresa Circular, organizados por la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB). Este honor nos llena de satisfacción y nos impulsa a seguir liderando el camino hacia un futuro más sostenible en la industria agrícola de las Islas Baleares.

Técnicas de cultivo sostenible

Actualmente, contamos con más de 300 hectáreas donde trabajamos el sistema de producción integrada y algunas fincas con cultivo ecológico. Una de las técnicas que usamos es la de las plantas reservorio. Por ejemplo, cada 10 tomateras se planta una “caléndula officinalis”, que atrae a los míridos, un insecto que parasita las larvas de la tuta, que es una de las peores plagas que afectan al cultivo de tomates. Gracias a estas zonas reservorio que potencian la población de míridos, evitamos esta plaga y conseguimos mantener el control de plagas mediante un sistema natural.

También utilizamos fauna auxiliar en los campos de sandías y melones, para luchar contra el pulgón, haciendo suelta de parasitoides del pulgón y plantando globularias en nuestros campos que son el refugio de nuestros aliados para el control de estas plagas.

Además, con el fin de reducir las emisiones de Co2 y la toxicidad de la tierra, y analizar todos y cada uno de los productos que usamos para favorecer el crecimiento de las frutas, verduras y hortalizas, este año seguimos con la lucha contra el plástico, ahora todo el plástico que tenemos de acolchado es biodegradable. Con esta medida hemos quitado del campo mallorquín hasta 200 km de plástico convencional, reduciendo asi los microplasticos que se podían quedar en nuestos campos.

Desperdicio alimentario cero.

Terracor está formado por 5 socios productores. Entre nosotros, cada temporada, hacemos una planificación de cultivos que nos ofrece muchas ventajas: (1) producción adecuada, (2) venta rentable, (3) uso efectivo de los recursos, (4) escalonamiento de cultivos todo el año, (5) rotación de cultivos. En cambio, si cada productor trabaja por su cuenta, sin una planificación usualmente se realizan trabajos desorganizados suponiendo una pérdida de tiempo y de recursos y generando una venta menos rentable dificultando la mejora de la productividad.

Dicho esto, nos podemos encontrar con algunos picos de producción. Ante estas situaciones actuamos de 4 formas:

  • Bajada de precio. Disminuimos el precio de venta para que algunos supermercados nos compren el exceso de producción mediante una oferta en sus tiendas.
  • Elaboración de otros productos. Cuando la fruta o verdura sobra o no cumple con los cánones estéticos impuestos por el mercado, realizamos mediante el proyecto Terragust, mermeladas, salsas, almíbares y todo tipo de conservas para evitar el desperdicio alimentario.
  • Donación a ONGs. Gran parte del producto sobrante, lo donamos a ONGs para que sean estas organizaciones quienes lo repartan entre las personas que más lo necesiten.
  • Donación a ganaderos. Cuando el producto ya no puede ser consumido por humanos, llamamos a algunos vecinos ganaderos para que se lo puedan dar a sus animales y así cerrar el ciclo.

El fomento de la producción local y el consumo de sí mismo en el territorio, sin exportaciones, genera un impacto ecológico casi nulo. No debemos olvidar, como bien se señala en el estudio “The global impacts of food production”, que parte de la huella ecológica se genera por la importación de productos manufacturados de otras partes del mundo, con el consiguiente medio de transporte (por tierra, mar o aire) que necesita y las energías que utiliza para ello. Al apostar por el producto y consumo local, esta variable queda eliminada.

Uso de materiales reciclados y/o reciclables.

Todas nuestras cajas, donde ponemos el producto cosechado del campo, son de plástico que proceden de material reciclado. Además evitamos el uso de envases de un solo uso y tenemos un sistema de cargo-abono de envases. Cuando dejamos al cliente el envase, le cargamos una cantidad que se le abona cuando lo devuelve. Así, utilizamos las cajas muchas veces.

Uso de fuentes de energía renovables.

1. Placas Solares: Energía Renovable en Acción

En nuestro compromiso con la sostenibilidad y economía circular, hemos implementado placas solares para satisfacer nuestras necesidades energéticas. La energía solar no solo reduce nuestra huella de carbono, sino que también nos permite contribuir a la red eléctrica con excedentes energéticos. ¡Es un paso importante hacia un futuro más sostenible y autosuficiente!

2. Sensores Hídricos: Gestión Inteligente del Agua

La gestión eficiente del agua es esencial para la agricultura sostenible. Utilizamos sensores hídricos avanzados que monitorean constantemente los niveles de humedad del suelo y las necesidades hídricas de nuestros cultivos. Esta tecnología nos permite optimizar el riego, evitando el desperdicio de agua y garantizando un uso preciso y responsable de este recurso vital.

Con estas prácticas, no solo contribuimos a la economía circular, sino que también demostramos que la agricultura puede ser una fuerza impulsora para el cambio positivo hacia un futuro más sostenible.

Proyecto Finhava

Nos hemos unido al proyecto Finhava de Tirme, donde podremos comprar el compost obtenido de los restos orgánicos de los hoteles adheridos. Nuestras hortalizas se alimentan de este producto y será recolectado y entregado de nuevo al hotel, obteniendo así el cierre del ciclo de los alimentos.

Proyecto CESAM

También, participamos en el proyecto europeo CESAM (ECONOMÍA CIRCULAR y SOLUCIONES SOSTENIBLES PARA EL SECTOR AGROALIMENTARIO EN EL MEDITERRANEO), donde colaboramos con nueve socios, cuatro son socios institucionales de los ecosistemas regionales de innovación y los otros cinco son PYMEs con necesidades específicas de inversión para desarrollar las soluciones innovadoras: NewTimes (OCC), Asclepios Tech (OCC), Terracor (IB), Derypol (CAT) y GoZeroWaste (CAT). Con este consorcio, el proyecto CESAM pretende promover soluciones innovadoras de economía circular y sostenibilidad para las tres regiones, con un fuerte potencial de desarrollo en otras regiones europeas. El proyecto se compone de 4 subproyectos de inversión que se completarán mediante convocatoria abierta de proyectos:

1. Tratamiento y reciclaje de aguas industriales / Uso responsable del agua

2. Envases: ecodiseño/sin plástico, nuevos materiales o soluciones circulares

3. Optimización de procesos y procesos circulares: reducción de residuos

4. Recuperación de coproductos.

Dentro de este marco, se realizarán Workshops y conferencias en materia de economía circular en agricultura por expertos en la materia a nuestros empleados.

Acciones de sensibilización a clientes internos y externos

Con los proyectos de Hort de Sa Vall y Terragust, pretendemos sensibilizar a nuestros clientes de la importancia del producto local, de la agricultura mallorquina y de las buenas prácticas en la tierra. Es por ello que realizamos visitas a las fincas de cultivo de Terracor desde marzo hasta octubre donde el propio agricultor explica nuestra forma de cultivar, sensibiliza sobre el producto de temporada y les permite recolectar sus propias frutas y verduras. En estas actividades mostramos los siguientes puntos:

– Fomentar la riqueza y producción territorial supone otorgar el peso específico que precisan los cultivadores. Por el carácter deslocalizador del capitalismo, el no apostar por el producto local y confrontarlo con la competencia externa supone la devaluación de sus productos, suponiendo, de este modo, un empobrecimiento de las clases medias y bajas. Siguiendo esta lógica, el ciclo de producción-consumo local supone generar puestos de trabajo, cuya dignidad no se aprecia en la exasperada competencia mundial en materia de importaciones, y la acumulación de riqueza en la misma tierra, ya que las divisas nunca salen del territorio. Esto repercute en la retroalimentación el círculo de gasto social y privado de las familias locales.

– Las características de la tierra mallorquina son muy propensas para abastecer la demanda local. Este dato cobra especial relevancia para poder apreciar la calidad del producto generado.

– Sensibilizar a la población balear de las ventajas de la alimentación y producción local de alimentos saludables.

– Dar a conocer el mundo rural y agroalimentario. Enseñar sobre los productos de temporada.

– Asociar estilos de vida saludables a estos alimentos: deficiencias en la dieta, beneficios de consumo, importancia durante el crecimiento, etc.

– Potenciar el consumo de frutas, hortalizas, carnes y pescado de Mallorca.

Después de la visita de una hora y media, se procede a un menú degustación en medio de los campos, elaborado 100% con producto local, donde demostramos que es posible disfrutar de comer solo con producto de temporada.

Nuestro compromiso con la economía circular es fundamental en todas nuestras operaciones. Desde el cultivo de frutas y hortalizas hasta la distribución y entrega a nuestros clientes, nos esforzamos por adoptar prácticas que minimicen nuestro impacto ambiental y promuevan la sostenibilidad económica y social en nuestra comunidad.

Este reconocimiento no solo es un testimonio de nuestro arduo trabajo, sino también un estímulo para seguir innovando y mejorando en nuestras operaciones. Nos comprometemos a continuar implementando iniciativas circulares que fomenten la eficiencia de recursos, la reducción de residuos y la preservación de nuestros preciosos recursos naturales.

Agradecemos profundamente a CAEB por este honor y felicitamos a todas las empresas premiadas y finalistas por su dedicación a la promoción de prácticas empresariales sostenibles en las Islas Baleares.

¡Gracias por ser parte de nuestro viaje hacia la sostenibilidad!